Una de las visiones típicas de Sepúlveda desde lejos son los perfiles que dibujan las torres y campanarios de sus iglesias, desde el mirador de Zuloaga son tres las que divisamos, de izquierda a derecha tenemos la Iglesia de Santiago, entre las casas de la Villa, la del Salvador, luciendo desde lo alto, como presidiendo la vida de los sepulvedanos y en el otro extremo la de San Bartolomé.
Por el lado de la carretera que nos lleva a Peñafiel, antes del tramo de carretera conocido como “el paso malo”, son hasta cuatro las iglesias que podemos divisar desde nuestra posición, nuevamente de izquierda a derecha San Bartolomé, en el centro, arriba, El Salvador y abajo San Justo y Pastor y más a la izquierda la Iglesia de la Virgen de la Peña.
Santuario de la Virgen de la Peña
Románica, siglo XII, de planta similar al Salvador, el pórtico es del siglo XVI; de nave alta y torre adosada, su característica más importante es el Tímpano situado en la puerta de entrada, único en el románico Segoviano.
El ábside es prácticamente idéntico al Salvador, con columnas adosadas, arcos abocelados en sus vanos y una moldura ajedrezada que recorre todo el hemiciclo. La bóveda es de sillar de medio cañón, con arcos ciegos a uno y otro lado, sobre los que corre la cornisa que sirve de apoyo a la bóveda, sustentada por impostas columnarias de triple fuste.
En su interior se encuentra la imagen de la Virgen de la Peña, patrona de Sepúlveda, se trata de una talla de madera policromada del siglo XVII, que representa a la Virgen sentada con el Niño en brazos, una gran verja de hierro separa el altar mayor de la nave.Iglesia de Santiago
Recientemente restaurada con el fin de acoger en su interior la Casa del Parque, centro de interpretación del Parque Natural de las Hoces del Duratón.Una sola nave, rectangular, con ábside de cuarto de esfera de estilo mozárabe, de ladrillo con doble arquería y figuras geométricas, que es único en Sepúlveda.
Cuenta con una cripta subterránea, restos de una primitiva iglesia, en donde se encuentran tumbas antropomorfas excavadas en la roca que podrían datar del siglo X.Iglesia de San Justo y Pastor
Actual sede del Museo de los Fueros, románica de los siglos XII-XIII, declarada Monumento Nacional desde 1931, situada intramuros, tras la puerta del Azogue (mercado). Por su emplazamiento y magnitud, debió ser una de las iglesias más importantes de Sepúlveda.
Parece estar dedicada a la exaltación y culto de los mártires Justo y Pastor, cuya devoción en estas tierras alcanza una gran difusión en el siglo VII. De planta basilical, es la única iglesia románica de Sepúlveda que cuenta con tres naves, algo que por otro lado es poco frecuente en el románico rural, lo que indica que se trataba de una construcción ambiciosa, comparable con el más pujante románico de la ciudad de Segovia, con el cual, además coincide por su cronología tardía, finales del siglo XII
Iglesia de San Bartolomé
Románica del siglo XI-XII, de una sola nave con dos capillas formando crucero y cubierta de madera. La torre, de sillería, esta adosada a la Iglesia.
Destaca la escalinata de piedra, presidida por un bello Crucero renacentista, que da acceso al pórtico del templo.
Iglesia del Salvador
Coronando la Villa nos encontramos con esta iglesia iniciada su construcción en el siglo XI (año 1093) y que constituye uno del mayor exponente del románico segoviano.
De una sola nave de ábside semicircular, la torre se encuentra separada de la nave y se comunica con ella a través de un estrecho pasadizo abovedado.
La nave cubierta con bóveda de cañón, está dividida en tres tramos por arcos fajones apeados en pilastras. Adosadas a los muros tiene arcadas ciegas sobre columnas.Posee un hermoso pórtico con arcos agrupados por parejas apoyándose cada uno por separado en anchas pilastras y al juntarse en columnas comunes.
Lejos están las cinco iglesias actuales que hoy encontrar en la Villa de las quince que están catalogadas en el siglo XIII, reflejo de la población y de la economía de la época, a saber: Intramuros se situaban las del Salvador, Santa María de la Peña, Santiago, San Millán, Santos Justo y Pastor, San Pedro, San Juan, San Andrés, Santa Eulalia, San Esteban, San Sebastián y San Martín, y extramuros las de Santo Domingo, San Gil y San Bartolomé.
La distancia, obviamente, no siempre hace la indiferencia. Besos.
ResponderEliminarMenuda panorámica! Me gustan.. porque a su vez incluyes información que nos ayuda a situar a esta preciosa villa medieval asentada sobre un promotorio que circunda el Rio Duratón, llena de lugares secretos, casi inaccesibles.
ResponderEliminarEl formato elegido da la sensación de amplitud,de profundidad, sin llegar a perdernos en el sentido de la proporción y de la perspectiva.
Incluyes en algunas fotos motivos rítmicos como son los tejados de sus casas, algunas señoriales.. de una forma ordenada..pero sin desviarnos la mirada del centro de atención como es la iglesia a la que haces referencia. Lejanía..pero muy cercana!